Un comentario anónimo (que me gustaría dejara de serlo) me hizo la pregunta del millón: ¿Cómo está tu corazón?
La respuesta es ambigua, pues digamos que mi corazón como músculo se encuentra en perfectas condiciones, mejor de lo que pudiera pedir, a pesar de que he dejado de lado un poco el deporte.
Pero el corazón, el que late por un amor, ese corazón no sé como está. Creo está en su año sabático, porque no se digna a sentir nada; bueno me equivoco, sí siente pero sólo odio, odio hacia la injusticia y la desigualdad en todas sus presentaciones.
Lo declaro entonces en vacaciones… qué envidia!!!
¿Y su corazón cómo está?
La respuesta es ambigua, pues digamos que mi corazón como músculo se encuentra en perfectas condiciones, mejor de lo que pudiera pedir, a pesar de que he dejado de lado un poco el deporte.
Pero el corazón, el que late por un amor, ese corazón no sé como está. Creo está en su año sabático, porque no se digna a sentir nada; bueno me equivoco, sí siente pero sólo odio, odio hacia la injusticia y la desigualdad en todas sus presentaciones.
Lo declaro entonces en vacaciones… qué envidia!!!
¿Y su corazón cómo está?